Sus obras son instalaciones dinámicas en madera, metal o papel donde combina la escultura y el dibujo, en diálogo con el espacio, en un singular juego poético que se funde con la naturaleza.
La muestra podrá visitarse hasta el próximo 14 de marzo, en el Pabellón Villanueva del Real Jardín Botánico
El Pabellón Villanueva del Real Jardín Botánico acogerá hasta el próximo 14 de marzo la exposición Principio de incertidumbre, de la artista madrileña Mar Solis.
La obra de Mar Solís se caracteriza por la energía intrínseca de sus piezas: estructuras germinales en madera, metal o papel, que en diálogo con el espacio que las rodea incitan al público a reflexionar sobre el entorno. Son instalaciones intensamente dinámicas, que vibran sobre sí mismas de manera sutil, entre la potencia expresiva y la delicadeza.
Cada pieza, en pequeño o gran formato, genera un singular juego poético que se funde con la naturaleza proponiendo discursos cinéticos y vibraciones esencialmente plásticas.
Este proyecto para el Jardín Botánico de Madrid mantiene esas premisas, con sus propósitos site-specific y su profundo sentido escenográfico, con el que pretende articular respuestas, conferir significados estéticos al contexto y cargarlo de especificidad.
Sus obras ponen de manifiesto la necesidad de Mar Solís de apreciar el arte como un medio de investigación, como una herramienta experimental para crear hipótesis y, por eso, siempre ha compartido ideales con la ciencia.
En las obras de Mar Solís nada es lo que parece. Cada obra manifiesta una complicidad interpretativa con el espectador e impulsa una dualidad, donde caben tanto las ideas de lo real (que en arte es siempre una forma de abstracción), como de lo irreconocible (que en arte es siempre otra forma de realidad).
Sobre Mar Solis
En su consolidada trayectoria Mar Solís (Madrid, 1967) ha realizado treinta y cinco exposiciones individuales en salas públicas y privadas, participando en sesenta exposicones colectivas y recibiendo la Beca Velázquez, la Beca Ville de Paris, la Beca Festival Assilah (Marruecos), la Beca Delfina Foundation (Londres), el Premio Ojo Crítico de RNE y el Primer Premio Caja de Extremadura. Tiene obras en importantes centros internacionales, como el Parque Kyonggido (Corea del Sur), Parque Kasklauttanen (Laponia), o el Palacio de Santa Cruz (Valladolid), y en colecciones como el IVAM, la Colección BBVA, Fundación María Cristina Masaveu Peterson y Comunidad de Madrid, entre otras. Sus últimos trabajos se mostraron el año pasado en el Centro de Arte de Alcobendas y, el próximo mes de septiembre, presentará un nuevo proyecto individual en Apertura Madrid 2021 de la mano de Puxagallery, galería que la representa y con la que ha participado en los últimos años varias ferias internacionales.
