La obra incluye charlas con personalidades de diferentes ámbitos como el cineasta Gonzalo Suarez, el filósofo Víctor Gómez y el neurocirujano Alberto Portera, junto a miembros de su familia como su mujer, hija o yerno
La fuerza creativa, el valor de su familia, la inspiración o el amor por la tierra son algunos de los temas que se recogen en estas conversaciones
Transcritas de varias entrevistas organizadas por Susana Chillida, impulsora de este libro, se celebraron entre 1992 y 1997
El prólogo, de la propia Susana Chillida, desvela algunos aspectos del momento y los motivos por los que se gestaron estas grabaciones que, llevadas ahora al papel se leen como una suerte de testamento vital, artístico y espiritual de Chillida
224 páginas | Español | 14, 5 x 22 cm PVP 28 € | ISBN 978-84-17769-52-9
El 19 de agosto de 2022 fallecía Eduardo Chillida, uno de los más importantes escultores del arte contemporáneo español. Obras como el Peine del viento, en San Sebastián, el Elogio del agua, en Barcelona o Berlín, en la capital alemana, se han convertido en señas de identidad de los espacios y ciudades en los que se encuentran y recuerdan cada día a uno de los más importantes autores del arte contemporáneo español.
La Fábrica publica, dentro de la colección Blow Up, el libro Eduardo Chillida. Conversaciones, impulsado y editado por Susana Chillida y que recoge una serie de conversaciones del escultor con diferentes personajes que nos descubren su universo íntimo y creativo.
Como señala Susana Chillida en el prólogo del libro: Eduardo Chillida, uno de los personajes que retendrá el siglo XX, representaba la limpieza, la valentía, el empuje, la fuerza. Encarnaba la sencillez, la humanidad, la dignidad, la belleza, cualidades todas ellas no siempre fáciles de ejercitar en un mundo de envidias dominado mayormente por el progreso.”
Y precisamente este libro recoge todos esos aspectos de Chillida, gracias a la transcripción de un total de once conversaciones, grabadas por su hija, entre 1992 y 1997. Charlas en las que aborda cuestiones como la fuerza creativa, recuerdos familiares, su amor por el deporte o la importancia que daba a la espiritualidad.
Los conversadores, con los que Chillida comparte sus experiencias y confidencias son el cineasta Gonzalo Suárez, el experto en arte Kosme de Barañano, el filósofo Víctor Gómez Pin, el director emérito del Guggenheim de Nueva York Thomas Messer, el periodista Roberto Herrero, el neurocirujano Alberto Portera y el jesuita y criminólogo Antonio Beristain, junto a colaboradores como Hans Spinner o José Antonio Fernández Ordóñez, y familiares como su mujer, Pilar Belzunce, su yerno, el escritor Eduardo Iglesias, y su hija, Susana Chillida.
La primera serie de conversaciones, de 1992 surgen a propósito de un encargo que recibió su hija de realizar una película sobre la obra Homenaje a Hokusai. Precisamente inaugura este libro una conversación entre padre e hija, en la que, partiendo de la obra de Chillida, se adentran también en recuerdos familiares de la infancia del escultor.
La segunda tanda de conversaciones, de 1994 incluye temas como los comienzos de Chillida como artista o los lugares del mundo en los que vició.
Por último, la tercera sección, rodada en 1997 en Madrid incluye a amigos y colaboradores de Chillida, personas ajenas a la familia, pero con los que trabajó a lo largo de su vida.
Como señala Susana Chillida: “Lo interesante de estas conversaciones, muy distintas entre sí, es que enfrentan a Chillida con temas muy diversos a la vez que aportan datos biográficos de un modo sutil. Así, vemos que mantuvo relaciones muy ricas con el mundo de la filosofía e incluso de las matemáticas; que fue profesor visitante en la Universidad de Harvard…; que tenía una percepción muy fina del deporte además de haber sido él mismo un deportista…”
Así esta obra puede leerse como una suerte de testamento vital, artístico y espiritual que nos devuelve una parte íntima y desconocida del genial artista.
Sobre Eduardo Chillida
Eduardo Chillida (San Sebastián, 1924-2002) es uno de los grandes artistas del siglo xx. Su deslumbrante trabajo le valió los más importantes galardones, como la Medalla de Oro de las Bellas Artes (1981), el Premio Príncipe de Asturias (1987) o la Cruz de la Orden al Mérito de Portugal (1995). Sus obras, nacidas de una pregunta constante al tiempo y el espacio, alcanzan la plenitud en los lugares donde el escultor buscaba respuestas: el mar, el horizonte, la luz atlántica… Su legado le sitúa como uno de los máximos exponentes de la escultura de la segunda mitad del siglo XX.
