El próximo 16 de enero inaugura la nueva temporada de #LaParedRojaDeLaFábrica con la exposición de Portraits de la artista Cristina Fernández Nuñez.
Portraits
Dibujos a grafito, collage, impresión digital y acuarela, además de alguna pieza a caballo entre la pintura y la escultura conforman el último trabajo de la artista viguesa Cristina Fernández Núñez (Vigo, 1971). Su reconocida obsesión por el cultivo y cuidado de las plantas hace de los elementos vegetales uno de los motivos recurrentes de su pintura. Además de jugar con la proyección de la sombra de diferentes plantas recortadas sobre el papel, objetualiza la imagen introduciendo elementos en tres dimensiones y retoma su gusto por la estampación y el papel japonés.
Movida por una suerte de nostalgia, Fernández Núñez se apropia de antiguos papeles pintados para componer este trabajo. Una de las piezas surge del recorte de un anuncio de tijeras, un collage cuya imagen sugiere la figura de una abuela utilizando unas tijeras donde “pasa el testigo” a su nieta.
Si lo femenino queda patente, aquí retoma también otro de sus motivos predilectos, la mosca. Insecto cotidiano donde los haya, funciona como una vanitas (pues nos habla de la brevedad de las flores que pronto se marchitarán) y a la vez propone un juego de percepción: ¿está la mosca representada o posada sobre el papel? De una forma u otra no está sola, hormigas y polillas hacen su aparición.
Con el lirismo al que nos tiene acostumbrados flora y fauna protagonizan el último trabajo de la artista. Son también testigos mudos de una evolución plástica y tangible, donde las sombras dan paso a siluetas dibujadas explí-citamente. Puede que incluso sean reales como lo fueron Hypatia o Camille Claudel. Para verlas sólo hace falta arrojar luz, ocurre también con las polillas.
Lucía Carballeda Suárez
Comisaria
—Cristina Fernández Núñez
Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid (1994), Cristina Fernández Núñez (Vigo, 1971) se especializa en restauración de pintura, faceta que compagina con la docencia y la creación artística. Su obra ha sido seleccionada en varias ocasiones en el Certamen Internacional de Artes Plásticas de Valdepeñas y ha recibido entre otros premios la medalla de honor en la Bienal de Arte do Morrazo.
Su trabajo plantea una reflexión entre el orden y el caos, lo real y lo ficticio, la arquitectura y la naturaleza. Son recurrentes en su trabajo la cotidianidad (influencia de Morandi) y cada vez más en lo femenino, que pone de manifiesto en su obra sensible y llena de lirismo.
