La Fábrica edita Vital Mantra una obra en la que se descubre el universo del pintor Àlex de Fluvià a través de textos y ejemplos de sus piezas más representativas.
Vital Mantra reúne una selección de la obra más representativa del artistas abstracto. Veinte años de creación se reúnen en este ejemplar, con trabajos desde 1995 a 2015 y con obras realizadas en Barcelona, Nueva York, El Cairo, Tokio y Dubái.
Àlex de Fluvià abrió un diálogo entre sus profundas raíces mediterráneas y las influencias y estímulos que recibió en los países que visitó a lo largo de su vida. “Siempre me ha interesado la multiplicidad del gesto, su repetición espontánea y reiterativa. La idea del mantra interno que se repite dándome paz y focalización”, Àlex de Fluvià.
Fluvià supo plasmar en sus obras las distintas observaciones culturales experimentadas durante sus extensos viajes, en contraste con sus profundas raíces mediterráneas. Tres fuero los temas principales que abordó en sus trabajos: el paso del tiempo, el ritmo vital y las dicotomías (interior-exterior, yo-otros, vacío-lleno, esperanza-sufrimiento).
La Fábrica edita Vital Mantra, una obra en la que a través de textos y ejemplos de las piezas más representativas del artista catalán se profundiza en su obra y en las fuentes que usó como inspiración para la construcción de su imaginario.
Descubre Vital Mantra de Àlex de Fluvià
Sobre el autor
Àlex de Fluvià. Estudió Historia del Arte en la Universidad de Barcelona y fotografía en la School of Visual Arts de Nueva York. A finales de los años 90 se reafirma como artista durante su estancia de siete años en Nueva York. Afincado en el barrio de Williamsburg, mantiene íntimo contacto con otros artistas catalanes, como Lluís Lleó, Antoni Muntadas y Fernando Molero. Tras seis años en su estudio de Williamsburg, se instala en Egipto fascinado por el arabesco y la cultura del Cairo moderno. Sus dibujos y pinturas durante este periodo emanan la esencia de la mashrabia (celosía), e invitan al espectador a mirar a través de un entramado pictórico para descubrir mensajes ocultos en las obras.
Su interés por la investigación gestual del trazo da lugar a una estancia en Japón en 2006, donde estudia caligrafía japonesa (Shodō) en Tokio. Sus abstracciones incorporan patrones nipones y su icónica pincelada roja. Más tarde, durante su residencia artística en Dubái, evoluciona su lenguaje visual creando obras abstractas que resaltan la belleza de las formas gráficas del lenguaje árabe escrito y eliminan su significado literal.
Desde 2011, su producción artística explora la dualidad y hace referencia a la resistencia vivencial, política y social. Sus últimas obras mezclan mensajes de esperanza y alusiones a la transformación, la incertidumbre y la desigualdad. La yuxtaposición de la fotografía en blanco y negro junto a su pintura crea superficies ricas donde el collage, las marcas y los colores fluorescentes producen tensiones en la obra para transmitir su base conceptual.
De Fluvià expuso su obra en Nueva York, Londres, Múnich, Milán, Tokio, Corea, Ciudad de México, Oporto, Sevilla, Barcelona, Madrid, Basilea, El Cairo, Dubái, Abu Dabi, Bahréin y Arabia Saudí.