El origen de la especie. Cantar es evolucionar y revolucionar

Su primer álbum apareció en 1982. Su marcada individualidad irrumpió en un género que aceptaba todavía con reticencias a las mujeres. Disco a disco, la envergadura de Luz Casal fue creciendo. Ya en 1989 se editó Luz V, con una repercusión de tal calibre que nadie dudaba ya de que Luz era la solista española por excelencia. Fue entonces cuando se atrevió a aceptar la proposición de Pedro Almodóvar, que le ofreció interpretar dos canciones en su nueva película, Tacones lejanos. A la aceptación que ya tenía en América del Sur, se sumó su éxito en Francia, con el lleno absoluto en el mítico teatro Olympia de París. Cuando en 2007 un cáncer de mama interrumpió la gira de Sencilla alegría, Luz combinó el tratamiento con la preparación de un nuevo disco, Vida tóxica. En 2009, Luz publicó La pasión, un sentido homenaje a la música hispanoamericana. En 2011, y tras superar de nuevo el zarpazo del cáncer, Luz comenzó una gira internacional que la llevó por escenarios de medio mundo, desde Pekín hasta Montreal. Los últimos años han supuesto una sucesión de reconocimientos. Al Grammy Latino honorífico o la Medalla de las Artes de Francia se suma ahora el Premio Nacional de Músicas Actuales.