Mis mensajes en botellas de champaña, de Carlos Wynter Melo

Ant6 de 10Sig
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25 de octubre de 2007

Para: kclark@aol.com
De: nzuniga@yahoo.com
Asunto: Quién no conoce en Francia a alguien llamado Pierre.

Hola Kenneth,

El otro día estaba leyendo a Paulo Coelho y escuchando a Grizzly Bear cuando un chico de cabello castaño se acercó a mí. Dutchess Anne se mezclaba en mi mente con una frase que comprendí luego: Los ángeles también tienen sus estrategias. El joven me preguntó en perfecto inglés, si deseaba conocer la Torre Eiffel. ¿Es posible incluir en este mensaje más lugares comunes?
Pensé que era el guía turístico de alguna empresa informal así que le pregunté cuánto costaba la visita. Entonces sonrió y dijo que no pensaba cobrarme, que se daba por satisfecho con la compañía de una americana hermosa como yo. Fue en ese momento cuando me sonrojé como una flor en capullo, o por lo menos eso me dijo.
Y yo que creí que los franceses odiaban a los estadounidenses –este es el momento, Kenneth, en que dices: pero no a las estadounidenses. ¿Cómo negarme a acompañar al tal Pierre hasta el fin del mundo si me lo pedía?
Guardé mi Ipod y el libro de Coelho en mi bolso tejido, subí al Volkswagen viejo que Pierre me señaló y bajé la ventanilla como preparándome para no perder un solo detalle del panorama.
El monumento estaba más cerca de lo que creí. Su magnitud, mi estatura en comparación con su tamaño, me hizo sentir poca cosa. Pierre dijo que iba ahí para recordar que la Historia superaba sus fuerzas.
No somos nada, Kenneth. Siempre habrá una sorpresa, nunca lo sabremos todo.
Los ángeles también tienen sus estrategias, recordé. Y es que Pierre fue mi ángel, por lo menos en ese momento. Comprendí tantas cosas gracias a él. Me sentía tan sola y él me hizo compañía…
Sí, Kenneth, estoy haciendo el amor con otro. ¿Y qué? No creo que te moleste. Como no has respondido mis mensajes…
Lo de César fue una equivocación pero en mi aventura con Pierre estoy consciente. Me entrego a él con toda mi voluntad.
Pero tal vez está llena tu cuenta electrónica y mis mensajes son rechazados, o se están acumulando en el almacenamiento de correo indeseable. Ojalá sea eso.
Te repito que el teléfono celular de mi mamá es el 4567-89015. En cualquier guía telefónica aparecen los códigos de llamadas al extranjero, las claves de Francia y de París.

Te quiere,

Nancy

PS Hoy no he bebido pero lo haré más tarde.

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