El descubrimiento de Marifé Santiago Bolaños: la poesía
La escritora Marifé Santiago Bolaños está de doble actualidad: a la publicación de su libro de poemas Las constelaciones del Capitán —de edición muy reciente en Eme, la colección que La Palma dedica a la literatura escrita por mujeres—, añade las originales presentaciones de esta obra.
Así, los versos de Las constelaciones del Capitán —y la lectura dramatizada a cargo de la propia autora— se encontrarán con el piano Héctor Guerrero y los bailarines Gloria M. García Arambarry y Ioshinobu Navarro Sanler. La cita, el viernes 30 de enero en Madrid, en el Teatro de la Escuela Superior de Canto, a las 18.00 h.
Mientras tanto hemos pedido a Marifé, una de esas autoras cuyo decir es pura revelación, que nos descubra algunos libros o autores de los que no podemos prescindir. Y nos deja estas líneas, escritas en El Espinar durante el primer día con nieve de 2015.
«Elijo tres obras de tres poetas que suenan en la misma tonalidad estética dentro de mis últimas lecturas: Helor, de Luis Luna —exquisitamente editado por Esperanza Vives—, donde el poeta dialoga con el artista grabador Miguel Ángel Curiel en un poema-hilo, que se va tejiendo al ritmo de nuestros ojos y de nuestro corazón. Libro enigmático, simbólicamente cabalístico, donde leo:
Vivimos en el mundo de la rapidez, todo pasa rápidamente… fue entonces cuando la música de Arvo Pärt, Silentium, que está en el poema, se adelantó a la forma, la música es siempre presagio, color y equilibrio plástico. Ordenar, encontrar la melodía, dejar que los grabados y las palabras, ellas solas jugaran unas con otras, unidos por la belleza de los números.
Un presagio y un encuentro que ya Luis Luna y la sibila poética Lourdes de Abajo (compositora e intérprete de la música), entregaron en Almendra (Amargord Ediciones), a través de la delicadeza de un libro y un disco a los que Juan Carlos Mestre puso rostro y los poetas autores de los versos, voz.
…Dones en ese camino poético que también Teresa Sebastián compartirá muy pronto con los amantes de la belleza desde su próximo libro Camino de la Tierra, los poemas de Chile (en imprenta). Ella, como Luis Luna y Lourdes de Abajo, ha aprendido bien de los grandes maestros y maestras de la Poesía que el tiempo de los versos y el de los seres humanos no se mide con la misma arena, con los mismos segundos; y que en entenderlo radica su valor inmortal capaz de darle sentido y memoria a nuestras vidas. Es el más valioso “descubrimiento” que la Poesía nos regala».