La Fábrica inaugura el 7 de noviembre la exposición Caracas del arquitecto y fotógrafo Ramón Paolino, que ponen de manifiesto los diferentes prismas de una ciudad llena de contrastes.
La exposición está compuesta por una veintena de fotografías en blanco y negro que el propio autor define como “un cuento de la imagen urbana de la ciudad”.
Arquitecto de profesión, Ramón Paolini lleva más de treinta años retratando la capital venezolana. Como el mismo señala: “He tratado de captar su imagen en el transcurso de los años, intentando descifrar su tercera dimensión sobre las coordenadas donde se mueve la arquitectura: su espacio geográfico y su tiempo histórico definido por más de cuatro siglos, donde los últimos setenta años han marcado definitivamente su actual perfil urbano.”
El trabajo de Paolini nos ofrece una visión íntima de un lugar con historia, con un presente y un futuro que se construye y reconstruye con una tenacidad asombrosa.
Caracas es más que una ciudad desordenada; es un homenaje a la paradoja. Hecha de cemento, acero y cristal, sin embargo, está situada en un extraordinario paraje geográfico, rodeada de una extravagante naturaleza en la que no faltan montañas, valles y ríos.
A pesar de que la evolución arquitectónica de esta ciudad ha estado marcada por la influencia europea, Caracas ha sabido mantener un carácter y una presencia singulares que le otorgan una gran personalidad entre las grandes urbes latinoamericanas.
La exposición, que podrá visitarse hasta el 8 de diciembre supone una reivindicación de un lugar con una historia que contar, y que es desconocida tanto para sus habitantes como para quien la visita.